Dra. Carlota López Kaufman
Es un dispositivo de plástico, pequeño y flexible, con hilos de cobre que debe ser colocado por el médico dentro del útero de la mujer. Se lo conoce popularmente como “espiral”. Su presencia impide que los espermatozoides no lleguen a encontrarse con el óvulo para fecundarlo. Son altamente eficaces pudiendo usarse por tiempo prolongado. Requiere indicación y control médico periódico. Otras ventajas que posee este método son la independencia del uso en cada relación sexual, su bajo costo y rápida reversibilidad. No protege contra las infecciones de transmisión sexual.